Siete delincuentes que habían sido capturados por la Policía en flagrancia cuando robaban más de 200 metros de cable de una cámara subterránea, fueron puestos en libertad al no haberse realizado el pedido de prisión preventiva por parte de la Fiscalía.
Tras su detención, los malhechores -que se hicieron pasar por técnicos de telecomunicaciones- fueron llevados a la Depincri de Los Olivos. La investigación estuvo a cargo de la Segunda Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Los Olivos, siendo el doctor Rabanal Bardales el fiscal adjunto encomendado por la Fiscalía para este caso.
La detención ocurrió mañana del sábado 20 de mayo; sin embargo, dos días después quedaron libres, informaron voceros de Movistar al pedir a las autoridades judiciales dar la debida diligencia a este delito que pone en peligro las comunicaciones de las familias.
De las siete personas capturadas y liberadas, dos poseen antecedentes de hurto agravado en este tipo de delito.
Robo de cables en aumento
En lo que va del 2023 se han capturado en flagrancia, solo en la ciudad de Lima, a 36 delincuentes por daños y robo de cables de la red de Movistar. A esto se suma el robo perpetrado el pasado 20 de mayo, donde fueron capturadas siete personas entre las que se incluyen dos delincuentes reincidentes.
Movistar hizo un llamado a las autoridades penales para que tomen conciencia de la gravedad de este tipo de robos, que perjudican a los clientes al interrumpir la conectividad, afectando estudios, trabajo y negocios.
Además, dijeron, esta clase de hurtos impactan con especial gravedad a los servicios públicos y del Estado, como hospitales, comisarías, bomberos, etc. afectando así a toda la ciudadanía.
Además de interrumpir las comunicaciones, los robos de cables ponen en peligro a la población, ya que en la mayoría de casos los delincuentes dejan al descubierto cámaras subterráneas, lo que constituye un grave riesgo para los transeúntes y vehículos que pasan por la zona.
Está en manos del Ministerio Público y el Poder Judicial que se cumpla la ley y que los detenidos sean procesados por los delitos que cometen. A nivel nacional, en lo que va del año la Policía ha detenido en flagrancia a más de 100 delincuentes. Sin embargo, la labor policial se ve truncada por la falta de órdenes de prisión preventiva por parte de las autoridades.
El robo de cables de telecomunicaciones es un delito que tiene penas que van desde los 4 a 8 años de prisión efectiva.