Si comió en exceso y no sabe como aplacar la indigestión o el dolor de estómago que presenta, la solución es muy fácil. Prepare una infusión de muña, planta medicinal de nuestros antepasados y su malestar se verá aliviado rápidamente.
La muña, cuyo nombre científico es Minthostachys mollis, crece de manera silvestre en las zonas alto andinas del Perú por arriba de los 1,500 msnm.
¿Dónde la puedes encontrar?
Se le puede encontrar en las serranías de Piura, La Libertad, Huánuco, Pasco, Junín, Huancavelica, Apurímac, Ayacucho, Arequipa, Moquegua y Tacna. A estas regiones se suman Amazonas, Cajamarca, Ancash, Pasco, Cusco y Puno.
“Esta planta medicinal es un arbusto que generalmente crece de forma natural o silvestre. La gente solo extrae las hojas y ramas de la muña lo cual es ventajoso porque esto permite que se vuelva a regenerar y seguir multiplicándose en las zonas altoandinas”, manifestó el biólogo Jorge Cabrera, investigador del Centro Nacional de Salud Intercultural (Censi) del Instituto Nacional de Salud (INS).
De hojas pequeñas, aserradas, con flores blancas reunidas en cortos racimos y con una altura que alcanza entre los 0.80 a 1.20 metros, la muña es considerada una planta milenaria del antiguo pueblo peruano cuyos usos han pasado de generación en generación hasta nuestros días.
Según indicó Cabrera para la agencia Andina, esta planta era utilizada desde tiempos remotos por los pueblos indígenas como saborizantes de platos típicos de la región o para condimentar algún tipo de salsa picante, además de las propiedades curativas que posee.
¿Cuáles son los beneficios de la muña?
Una de sus características más destacada es el aroma, como ocurre con la menta o el cedrón. Está compuesta por aceites esenciales presentes en sus hojas y tallos, donde se concentra su poder curativo para calmar problemas digestivos; entre ellos la flatulencia, el dolor de estómago, la indigestión, la acidez estomacal y la halitosis.
“Sus propiedades son principalmente digestivas. Por ejemplo, ayuda a expulsar los gases, favorece el movimiento intestinal si es que ha ingerido mucha grasa. También permite la mejor absorción de los diferentes compuestos que tiene la comida y ayuda a la digestión”, refirió.
Otros de los beneficios es la capacidad de aliviar algunas enfermedades respiratorias como el resfrío, la gripe, la tos, la bronquitis, la congestión nasal. Incluso se le adjudica poderes antiinflamatorios y antibacterianos.
Los viajeros recurren a esta planta medicinal para combatir el soroche, pero lo hacen a través del aceite de muña que se obtiene bajo un proceso de destilación de las hojas y tallos.
“Para contrarrestar el soroche algunas personas se frotan unas gotas de aceite de muña en las sienes lo cual ayuda a calmar los efectos de la altura, como el dolor de cabeza u otros malestares”, comentó el experto.
¿Muña filtrante o muña natural?
Jorge Cabrera manifestó que tanto el filtrante de muña como la que se vende en forma natural, con hojas, tallos y flores, tiene las mismas propiedades terapéuticas.
La diferencia radica en que la primera ha pasado por un proceso industrial que garantiza la calidad del producto y su dosificación; lo que no ocurre en su presentación en estado natural. Si está almacenada de forma incorrecta podría perder sus propiedades.
El biólogo del INS recomendó adquirirla en lugares seguros, para obtenerla fresca y libre de hongos.
Modo de preparación
Hierba en un litro de agua un atado de muña (6 a 8 ramitas) y deje reposar por unos minutos. Otra forma de preparación es colocar 5 o 6 hojitas frescas de muña en una taza con agua caliente o en su defecto utilizar un filtrante de esta planta.
La muña puede combinarse también con otras plantas aromáticas como el toronjil, eucalipto, cedrón y menta, convirtiéndola en una potente infusión que alivia males respiratorios.
¿Tiene alguna contraindicación?
Acerca de las contraindicaciones que tiene esta planta medicinal, el biólogo precisó que existen reportes médicos que señalan que su consumo prolongado podría causar daño hepático por lo que aconsejó no abusar en su ingesta.
“Hay algunos reportes que indican que podría causar daño hepático por los aceites esenciales que contiene la muña, pero para que ocurra esto la cantidad que se tome tendría que ser bastante y de forma prolongada. La muña es muy buena pero no hay que abusar de una sola planta. Por eso, se recomienda tomarla 2 a 3 días seguidos o máximo una semana y luego descansar 7 días para volverla a beber”, puntualizó.
Cabrera enfatizó la importancia de revalorar el uso de las plantas medicinales en el Perú ya que provienen del conocimiento de nuestros antepasados incas que hasta hoy perduran y que han traído buenos resultados y beneficios para combatir diversas dolencias en la población.